El tercer título mundial para los brasileños llegó en 1970, al presentarse con un equipo que es considerado como uno de los mejores de la historia. Como no existía ningún campeonato femenino unificado de Primera División, el entrenador debió utilizar diferentes recursos para captar a las jugadoras. En el Mundial de Fútbol de 1966 celebrada en Inglaterra el entrenador brasileño Vicente Feola trabajó con 47 jugadores, de los cuales solo 22 irían a Inglaterra, liverpool tienda lo que causó cierta tensión interna y presión psicológica sobre los jugadores y el personal de gestión.